domingo, 27 de junio de 2010

En honor a...

Limerencia... como cuando echo la vista atrás... y veo...

Veo tu silueta, Diosa, mi Musa, adentrarse en mi Templo. En nuestro Templo. En el Templo Devod. “no intentes hacerme cambiar...”

Suena en mi interior esa música de Deluxe... ”ya se... que no es... exactamente, lo que debería de ser... pero me río al pensar... que crees que voy a ceder... se que... no es fácil,...”

Dios... claro que no lo entiendes. Tú no te ves. No te ves acercarte. No te ves aparecer. No escuchas lo que se expande en mi interior, al verte toda tú, desde lejos. No... no escuchas esta música que suena dentro de mi, aunque sea solo un adorno a tu presencia. No nos ves a los dos.

Supongo que hay cosas que... claro que no entiendes. Tú no te ves, como yo, acercarte. Tú no te ves, como yo, aparecer.

“...pero al final tu caerás... y puede que yo ya no esté... no intentes hacerme cambiar... no me pidas ese favor...”